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 pórtlijas  de  los  cerros  resultáton  en  la  hoya  porciones  ,  que  mezcladas  con  la  
 tierra  que  allí  hallaron  ,  han  ido  formando  campos  de  diversa  substancia.  Observan  
 con  cuidado  los  de  Ibi  estas  diferencias  :  notan  las  variaciones  de  la  atmosfera  en  
 cada  estación  ;  calculan  las  aguas  que  tienen  ,  y  las  que  necesitan  los  campos  ;  y  
 combinando  todas  estas  circunstancias  como  buenos  agricultores  plantan  los  árboles  
 ,  y  siembran  según  lo  pide  la  bondad  ,  fuerza  ó  debilidad  del  terreno  , y  el  
 tiempo  en  que  florccc  y  fructifica  cada  producción.  As í  sacan  el  mejor  partido  de  
 la  tierra  ,  y  evitan  quanto  es  posible  los  riesgos  y  daños  procedidos  de  la  ignorancia. 
   Uno  de  los  labradores  mas  activos  é  industriosos  de  Ibi  es  Don  Josef  Alcara's,  
 quien  ha  logrado  copiosos  frutos  de  su  aplicación  é  industtia.  Veía  una  extensión  
 considerable  casi  erial  y  abandonada  por  la  naturaleza  del  terreno  ,  compuesto  de  
 tierra  algo  arenisca  con  mucha  piedra  y  chinas,  y  mucho  mas  por  un  barranco  que  
 sucesivamente  robaba  la  tienra  útil.  Concibió  la  idea  de  contenerle  en  un  cauce  fixo 
 ,  y  de  aprovecharse  de  sus  avenidas  ya  para  regar  los  campos ,  ya  para  rellenar  
 otros  profundos  con  los  depósitos  que  dexarian  las  aguas.  Hi zo  en  la  parte  
 superior  del  barranco  una  presa  ,  y  desde  ella  un  canal  de  riego  para  conducir  las  
 aguas  y  regar  lo  mas  alto  de  la  heredad  ,  que  aniveló  con  excavaciones  y  graderías  
 :  forzó  el  barranco  á  que  corriese  en  línea  recta  ,  levantando  en  partes  fuertes  
 malecones  ,  y  abriendo  en  otras  canales  subterráneos  í  y  tomó  las  correspondientes  
 providencias  para  que  sus  campos  se  mejorasen  siempre  ,  preservándoles  del  daño  
 que  pudieran  causarles  avenidas  furiosas.  As í  logró  reducir  á  huertas  terrenos  inlítiles  
 , haciéndoles  producir  seis  veces  mas  fruto  que  quando  entraron  en  su  poder.  
 V i  con  gusto  aquella  transformación  en  1792.  Muda  este  peritísimo  labrador  según  
 le  parece  la  calidad  de  sus  viñas  y  parras  injertándolas  del  modo  siguiente.  
 Corta  la  cepa  horízontalmente  á  quatto  ó  seis  dedos  sobre  el  suelo  del  campo  ,  y  
 hace  dos  cortes  perpendiculares  que  separen  la  corteza  y  porcion  de  madera  que  
 mira  al  mediodía  ;  prepara  de  antemano  púas  de  la  calidad  de  uva  deseada,  conservando  
 en  cada  una  dos  yemas  ,  y  las  corta  en  chanfran  para  introducirlas  en  el  
 corte  perpendicular  ,  de  modo  que  se  toquen  los  vivos  del  inxerto  y  c epa,  quedando  
 á  un  mismo  lado  las  cortezas  ; ajusta  luego  el  inxerto  sujetándolo  con  un  
 esparto  ,  y  cubre  las  heridas  con  hojas  estruxadas  de  la  misma  viña.  Para  prolongar  
 la  vida  de  sus  viñas  y  parras  las  poda  de  manera  que  solamente  queda  una  
 yema  en  cada  vara,  y  preiicre  la  calidad  al  ninnerò  de  racimos.  También  muda  
 por  inxerto  la  c.ilidad  de  las  bellotas  ,  escogiendo  escudetes  en  las  deseadas  que  saca  
 de  los  ramos  que  ya  tienen  dos  años,  y  en  el  tiempo  en  que  el  licor  que  destilan  
 es  líquido  y  nada  pegajoso.  
 83  Aunque  son  grandes  las  mejoras  hechas  en  el  término  de  I b i ,  serian  mucho  
 mayores  sí  hubiera  riego  suficiente,  y  si  las  aguas  llevasen  allí  porcion  de  légamo  
 como  otras  ;  la  suma  pureza  de  ellas  tan  favorable  á  la  salud  de  los  vi - 
 vientes  perjudica  á  los  campos  ;  porque  entrando  en  estos  l impias,  transparentes  
 y  sin  cuerpos  extraños,  les  roban  y  se  asocian  lo  mas  precioso  de  la  tierra  y  las  
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