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 debieran  renovarse  los  en.ayos  plantándolas  c„  Io  incnlto  y  cn  los  sitios  donde  
 no  prosperan  los  al,nendros.  Conviene  probarlo  t o J o ,  y  vendendo  prcocupacìon  
 s  ™n„,nes  hacer  tncesantetnettte  nuevas  experiencias.  N o  hay  Icvcches  en  los  val 
 i "  de  Btar  y  Albayda  , y  con  rodo  eso  hay  pocas  higneras  ,  qne  si  se  nrultipli-- 
 casen  danan  „ n e  a  utilidad.  He  visto  p,-evalecer  la  higt^era  en  ^trages  dest  ^ p l  .  
 dos  como  en  las  a l tu^s  de  Barig  ,  ^•¡lafa,ncs,  Benas.íl y  sierra  e l  E v a d a n .  Ac á  o  
 logranan  ,gna  be,K-„cio  los  de  Castalia  tentando  vatios  nredios.  cLgen  Í  Z  
 =400  cahtces  de  trtgo  ,  de  cebada  ,  500.  entre  avena  y  centeno  ,  6 0 0  de  nrai.  
 cerca  de  5 0 0  entre  garbanzos,  ahnortas,  lentejas,  itabas  y  j„dias,  , 5 0 o  de  alm 
 e , t d r a « t  «s c a r a  ,  qt,e  forman  3D  arrobas  de  ainrendra  mondada  para  el  come r - 
 a o , 4 8 3  cantaros  de  v i n o ,  , 0 0  arrobas  de  caTtanto,  4 4 0 0  de  aceyte  ,  6 0 0  de  
 . n , s ,  3 0 0  de  gualda  ,  60  de  mi e l ,  3 6 0  de  l a n a ,  3 ^  de  esparto  ,  y  80  libras  de  
 seda.  1  .erren  tres  fabncas  de  aguardiente,  que  consumen  cántaros  de  vino  
 vartos  telares  de  lienzo  y  sarga,  y  fabrican  muchos  millares  de  alpargates  de  es  '  
 parto  y  cáñamo.  "  
 ^ 7=  Es  cotBun  el  yeso  en  el  térmitto  de  Castalia,  con  especialidad  en  el  distr, 
 to  c o n o a d o  con  el  nombre  de  Yesares.  Hállanse  alli  varios  ccrros  en  forma  de  
 escalones  para  subir  á  la  Re d o n d a  y  Serratelia  ,  cubiertos  de  tierra  arcillosa  roxa  
 que  descansa  sobre  otra  mas  dura  y  menos  colorada  ;  debaxo  de  la  qual  está  el  v e - 
 so  en  losas  u  Itojas  íntimamente  unida s ,  y  á  veces  cristalizado  :  su  color  es  entre  
 blanco  y  negro.  La s  vertientes  de  los  montes  vecinos  han  excavado  en  los  yesares  
 profundas  atroyadas  i  y  en  algunos  ribazos  se  ven  capas  terreas  ,  que  alternan  con  
 onas  de  cantos  redondeados  por  e spado  de  ,5  y  „ a s  palmos.  Subiendo  de  los  y e - 
 sares  a  los montes  solo  se  ven  piedras  calizas,  de  cuya  naturaleza  es  el  llamado  carrascal  
 de  Castalia,  en  que  se  hallan  con  freqüencia  fósiles,  espedalmente  núcleos  
 petttllcados  de  camas  ,  que  los  del  pais  creen  ser  almendras  petrificadas  por  la  
 grande  semejanza  que  tienen  con  la  almendra  llamada  p . s U ñ » .  ,  quando  está  
 auncubterta  d e s ú s  cortezas.  Crecen  en  aquellos  sitios  incultos  varias  plantas  -  es  
 común  el  h.pods to  ,  parasítico  allí  a  las  xaras  blanquecina  y  racemosa  ,  la  escorzonera  
 baxa  el  falso  camepitio  ,  la  gamarza  ó  alárgama  ,  el  torbisco  ,  el  romero  
 la  vela  anua l ,  la  col  vexigosa  ,  la  xara  escamosa  ,  y  las  que  tietren  hojas  parecidas  
 a  las  del  brezo  y  romero.  
 7 3  Desde  el  carrascal  veia  á  dos  leguas  de  distancia  el  Maigmd  ,  monte  cuya  
 punta  contea  sobresalía  entre  los  demás  de  la  comarca,  y  pareciéndome  aquel  sitro  
 el  mas  oportuno  para  descubrir  el  pais  ,  que  yace  al  sur  y  norte  ,  c amini  bácia  
 sus  ratees  ,  y  en  dos  horas  sub!  á  la  cumbre  por  cuestas  ásperas  cubiertas  de  vegetales  
 hasta  dos  terceras  partes  de  la  altura,  desnudas  y  peligrosas  en  d  resto.  Silos  
 ptnos  cortrtcabras  y  multítud  de  arbustos  impedían  el  paso  en  las  primeras  ,  los  
 repechos  despeñaderos  y  quebradas  aumentaban  la  dificultad  para  vencer  las  tilomas  
 Mas  llegado  á  la  punta  hallé  recompensadas  las  fatigas  al  observar  multitud  
 de  plantas  que  solamente  crecen  en  Peñagolosa,  Mariola  y  sitios  setrrcjantes ;  al  
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 ver  un  suelo  descarnado,  y  enormes  dientes  que  dexáron  las  moles  destruidas;  
 precipicios  horribles  y  cortes  casi  perpendiculares  hada  el  sur ;  largas  cuestas  hacia'  
 el  norte  ,  cubiertas  de  pinos  espesos  que  continuaban  hasta  los  barrancos.  Aume n - 
 tóse  el  gusto  con  la  agradable  sorpresa  de  registrar  un  pais  nuevo  y  dilatado  por  el  
 sur  ,  y  por  todas  partes, hermosas  vistas,  titiles  para  rectificar  la  geografía  del  r e y - 
 110. Mirando  al  norte  descubría  cn  una  profundidad  enorme  la  hoya  entera  de  Castalla  
 y  sus  pueblos;  vela  el  rio  que  formado  en  las  cercanías  de  Oníl  iba  serpeando  
 con  dirección  al  pantano  de  Al i c ant e ,  y  en  este  la  laguna  que  por  media  legua  
 forman  las  aguas  embalsadas,  vistosas  por  brillar  cn  días  los  rayos  del  sol  al  
 lado  de  obscuras  masas  de  pinos.  Foyade r e s ,  ó  sea  d  carrascal  de  Al c o y ,  se  prolongaba  
 hacia  d  oriente,  y  sobre  él  se  encumbraba  d  Al to  de Moncabrér  m  Mariola  
 :  quedaban  al  nordeste  los  montes  que  desde  el  pantano  se  agrupan  en  d  término  
 de  Xi x o n a ,  y  al  norueste  la  sierra  de  On í l ,  Saix  y  montañas  de  Pe t r é l ,  reconodéndose  
 la  nombrada  d  Cid.  Volví  despues  la  vista  hácia  d  mediodía',  ha'da  
 aquel  pais  nuevo  y  dilatado  ,  y  lo  vi  cerrado  al  este  por  d  mar  Mediterráneo  desde  
 la  huerta  de  Alicante  hasta  d  cabo  de  Sama  Pola  :  seguíase  El che  por  d  sur,  
 las  montañas  de  Orihuela,  y mas  lejos  las  de  Cartagena  : descubríase  Coix  en  lai  
 faldas  d d  monte  de  Callosa  ,  entre  d  qual  y  Saíx  , que  caía  al  poni ent e ,  mediaban  
 las montañas  de  Crevíllént,  quedando  cn  las  llanuras  y  vaUes  las  preciosas  huertas  
 de  El d a ,  Nove lda ,  Monforte  y  As p e  :  en  las  profundas  raices  d d  Ma igmd  se  descubría  
 Ag d s t ,  situado  en  la  meridiana  d d  punto  de  observación,  cuya  línea  p a - 
 saba  por  Elche  , dexando  á  la  derecha  Monforte  á muy  corta  distancia,  y  algo  mas  
 apartado  á  la  izquierda  ó  levante  d  monte  aislado  nombrado  Fo n t  calenta.  Este  
 monte  ,  Agds t  y  San  Vicente  d d  Raspeig  paredan  formar  un  triángulo  equilátero  
 , ocupando  d  Raspeig  el  ángulo  septentrional,  al  que  se  seguían  por  este  r umbo  
 multitud  de  montes.  
 7 4  Emp e c é  á  baxar  hácia  d  norte  pisando  peñas  calizas  y  gran  nitmero  de  
 vegetales  descritos  ya  en  d  discurso  de  esta  obra  : vi  con  f r eqüenda  el  teucrío  dorado  
 ,  el  buplevro  r ígido,  la  eufrasia  amarilla  ,  d  aliso  espinoso,  y  la  escrofularia  
 perruna. Las  cornicabras  se  levantan  á  doce  y  mas  pies  de  altura,  y  la  xara  con  hojas  
 de  laurel  á  seis,  lo  que  no  había  visto  en  otros  montes.  Atravesé  pinares,  y  un  
 terreno  bien  vestido  de  coscoxa  y  xaras  ;  empezó  d  cultivo  ,  y  llegué  á  las  raices  
 en  hora  y  media  ,  contitruando  despues  por  d  término  de  Castalia  ,  extendido  en  
 esta  dirección  como  dos  leguas  y  media  hasta  d  de  Oníl.  En t r e  estos  dos  pueblos  
 queda  media  legua  de  llanuras,  y  en  ellas  los  marjales,  precedidos  de  un  suelo  
 arenisco  :  es  tanto  lo  que  rinden  ,  que  d  se  deben  reputar  por  los  mas  fértiles  dd  
 reyno  ,  o  sus  cultivadores  por  los  mas  industriosos  é  inteligentes.  Lo  son  mucho  
 efectivamente,  como  fértilísima  de  suyo  la  tierra.  Es t a ,  aunque  naturalmente  de  
 arcilla  blanquecina  ,  aparece  obscura  por  los  abonos  que  le  añadid  d  colono;  me - 
 jorase  con  mezclas  de  arena  quando  es  sobrado  tenaz  ; y  es  transportada  otras  veces  
 a  los  campos  areniscos  para  darles  substaircía.  Excaváron  los  de  Oníl  varios  azarr