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progresos que hace. Hu b o antiguamente una especie de muelle que Escolano describió
de este modo en la col. 269 del segundo tomo : „Ti e ne este pueblo del
„ G r ao un muelle d puente de madera de 600 pasos de largo para embarcar y des-
„embarcar , que se conserva con mucho trabajo y gasto del c omú n , por comerse
„los palos y estacas en que apoya un invisible gusanillo que llaman b r oma , sin
„ser posible que se haga argamasado y de piedra 5 porque son tantos los bancos de
„arena que el fluxo y refluxo de la corriente le va arrimando , que de un año pa-
„ra otro se queda la mitad del muelle en seco por la parte de tierra , y es fuerza
„andar siempre alargándole para adent ro, que á no ser de madera no lo pudiera
„ l l e v a r , y fuera gasto perdido si se labrara de piedra." C o n todo en 1 6 7 6 se resolvió
hacer uno de piedra según el proyecto y planos de Toma s Gu e l d a , y se
construyó en pocos arios. Se ignora si l legó á su última perfección , y si se exea
i t ó según las reglas del arte : lo cierto es que 30 anos hace apenas quedaban
vestigios de aquella obra. D . Pedro Vi c ent e Ga l v o , actual Cura Párroco del Grao,
me aseguró haber leido en un manuscrito fidedigno : „que á principios de este sí-
„ g l o estaba el muelle entero , sir\-icndo para embarcar y desembarcar las mercan-
„cías y f rutos , y que cerca del tin del muelle á la parte de levante había una gran-
„de losa de mármol blanco con la inscripción del aiío en que se hizo , y los nom-
„bres de los que gobernaban la ciudad." Ah o r a sea por defecto de la construcción
, ahora por mal icia, como algunos creen ' , quedó el Gr a o sin muelle en todo
este siglo. Renac ían freqüentemente las ideas de construir una obra digna de los
Valencianos 5 presentábanse proy e c tos , pero siempre sin f ruto, hasta el aíío 1 7 9 1
en que se determinó la obra , y se empe zó á costa del Consulado , habiéndose
clavado la primera estaca el dia 26 de Mar zo de 1 7 9 2 baxo la dirección d e l L i -
geniero hidráulico D. Manue l de Mirallas.
6 1 . Es cogió este un sitio contiguo al que ocupó en el síglo pasado el muelle
destruido , distante como 400 varas al este de la poblacíon. Al l í empieza el mue -
lle , que debe formar una curva , y entrar mar adentro 900 varas : al poniente y
enfrente de la villa estará el contramuelle , que entrará en el mar 300 varas , quedando
al sur entre las extremidades del muelle y contramuelle una boca de 900
varas. D e los arranques del muelle y contramuelle siguen las obras hácía el baluarte
, que cierran enteramente el puerto , dexando solamente dos puertas, una junto
al citado baluarte , y otra á la extremidad de los almacenes hácia el este , mediando
entre ellas 400 varas. L o s murallones que entran en el mar tienen 30 varas de
ancho en la superficie descubierta , aumentando su grueso hasta el fondo , y están
defendidos con escollera por la parte exterior del puerto. Habrá en cada extremi -
dad una batería á barbeta , y una torre de observación. El muelle abrigará las
embarcaciones ancladas , y las defenderá de los nordestes y estes ; el contramuelle
I Se lee en algunos manuscritos que Rassét man- la puerta del Real hasta la torre del Temple. Véanse
dó arrancar las piedras de aquella obra, empleando- las pág. 197. ip8 del t. j .de la hisc. critica queFr .Jolas
en reparar el muro dé l a ciudad, que corre desde seph Texjdór dexóMS. en Sto. Domingo de Valencia.
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