apenas tiene aguas en verano , pero quando se acopian y detienen , filtran por las
tierras , y viciait la fuente principal de que bebe el pueblo.
90. Re a l se halla en la llanura , y Mont roy en la raiz oriental de un cerro,
en cuya cumbre se conserva parte del antiguo castillo. E l cerro es de yeso , cubierto
de seis ó mas pies de tierra gredosa , por lo conuui colorada y semejante á
la de los campos de aquel recinto ; prueba al parecer de que ellos se formaron de
las pérdidas y descomposición de los cerros. Mont roy es Encomienda de Mont e -
sa, y tiene r 4 o vec inos , todos labradores como los de R e a l , donde hay 160.
Cultivan la tierra con conocimiento , multiplican los machos en los algarrobos , y
les quitan la leña inút i l , lo que practican también en los olivos , aprovechan las
aguas del rio para variar las producciones en sus huertas, y tienen dilatados viñedos
y muclias moreras. Ai ín es capaz de mejoras el término, principalmente el
de Mont roy : la falta no se debe atribuir á desidia, sino á los pocos brazos que
hay para cultivarle. Habia muchos eriales y pocos árboles al prmcipio del siglo,
quando apénas llegaban á 200 los vecinos de ambos pueblos , y es de creer que
continuará en aumentarse el cultivo á medida que nuestra especie. Algunos piensan
que en tiempo de Moriscos era mayor la poblacion del reyno ; pero me lisonjeo
que el lector quedará persuadido de lo contrario. E n 1602 quando se trataba de
reducir á huertas las llanuras de Carlét y la Al c u d i a , el llano de Quart y otros
campos , decian en el informe „ q u e esta operacion haria felices á 83 pueblos , que
„tienen cerca de 90 vecinos." H o y pasan de 3 o 3 los que viven en ellos. En los
dos de que tratamos se cogen 3200 libras de seda , 680 cahices de t r i go, 42 0
de maiz , 2 7 8 cántaros de v ino , i S arrobas de a c e y t e , y 5© de algarrobas.
9 I. Apéna s hay una hora entre Re a l y L omb a y , que es uno de tres pueblos
que componen el Marquesado de su nombre, llamándose los otros Al f á rp y Catadau.
Todos quedan á la derecha del rio dispuestos en forma triangular, distando mutuamente
como medio quarto de legua, y colocados en las preciosas huertas que o cupan
el centro del Marquesado. Ti ene este como una hora de norte á sur entre los
términos de Picasént y Ca r l é t , y tres de oriente á poniente entre los de Al g iné t
y Dosaguas. Sus montes forman una herradura abierta al mediodia, y se prolongan
en cuesta hácia los pueblos sembrando el suelo de desigualdades y lomas. Sobre
una de estas, que es de hormigon endurecido y algunas peñas , está Al fárp,
que es el mas oriental, por cuyas raices pasa el rio , quedando al otro lado las ruinas
de Al édua , pueblo destruido. Lo s montes son cal izos, y los cerros , principalmente
hácia Al g i n é t , de canteras de yeso , las quales se hallan cubiertas de unos
16 pies de tierra gredosa, mezclada con arenas y chinas, que forman un cuerpo
sumamente duro , casi totalmente inútil para la agricultura : aun los campos inmediatos
á los yesares son estériles por el exceso de arenas. L o restante del término
es muy fért i l , pero descuidado por falta de brazos. L o s vecinos del Marquesado
son 900 , ocupados principalmente en cultivar la huerta , porque do ella sacan r i -
quezas considerables. Mayores serian y mas ciertas si vinieran mas aguas por el